No deja de llamar la atención que un 87% diga hoy que no simpatiza con ningún grupo político. La inmensa distancia con la situación de julio de 2017 solo lleva a recordar toda la crisis que hemos vivido durante el tiempo transcurrido. Cuando se pregunta por quienes deberían tener un rol más activo durante el 2019 (ojo, no el 2021) quienes aparecen, la respuesta fue espontánea, son quienes han estado actuando para apoyar la demanda de acción y/o reforma.
Vizcarra, el más mencionado, está entre los que comenzaron este ciclo de renovación de expectativas. También figura Salaverry, que ha mostrado un reciente cambio de comportamiento. No aparece nadie que actualmente esté vinculado a los grupos que pugnaron en la segunda vuelta del 2016. Por el contrario, sus partidos son los más castigados.
Por otro lado, la pregunta sobre personalidades políticas nos muestra un triple empate entre Mendoza, Barnechea y Guzmán. Tienen en común que, en el ojo del público, se les percibe asociados a la novedad, expectativa o posibilidad de cambio. Barnechea y Guzmán, al menos en estos resultados, se ven semejantes tanto en el nivel de evaluación positiva, negativa así como en el nivel de conocimiento (en el IEP incluimos esta variable). Mendoza tiene un porcentaje de imagen positiva semejante a los otros dos, pero las asociaciones negativas son mayores.
En todo caso, está mucho mejor evaluada que los otros personajes vinculados a la izquierda. Los Fujimori están luego de este primer grupo pero las menciones negativas son altas, de manera semejante a lo que ocurre con Acuña, los Humala o García. Algo a tomar en cuenta, considerando lo que será la dinámica regional, es el alto porcentaje de menciones positivas que tienen tanto Antauro Humala como Aduviri en el sur. Lo más probable es que esto se haga sentir en algún momento del año.
Publicado en el diario La República, el 3 de febrero 2019